Las deudas no siempre son problemáticas, y la capacidad de pago varía según cada caso. Ante dificultades, es crucial explorar alternativas para manejarlas.
Entendiendo la deuda
En Chile, endeudarse es común y casi el 98% de la población no lo considera un problema debido al fácil acceso al crédito. Sin embargo, el deudor promedio suele tener atrasos mayores a 90 días en el pago de cuotas. Anteriormente, la economía robusta facilitaba la toma de deudas, pero con el tiempo, el número de deudores y problemas legales ha aumentado.
Tipos de deuda en Chile
Deuda de Consumo: Compras con tarjetas de crédito o préstamos para bienes que pierden valor.
Deuda de Subsistencia: Préstamos para cubrir gastos básicos.
Deuda Hormiga: Pequeños préstamos no planificados que se acumulan.
Deuda de Apalancamiento: Créditos para inversiones que aumentan su valor, como vivienda o educación.
Opciones para salir de las deudas
Pagar la deuda: Vender bienes, solicitar ayuda familiar o pedir nuevos créditos (con precaución para evitar más endeudamiento).
Renegociación de Deudas (Ley 20.720): Reorganización y liquidación de deudas con nuevos plazos y condiciones a través de la Superintendencia de Insolvencia y Reemprendimiento.
Negociación Directa con Acreedores: Proponer acuerdos de pago o refinanciamiento. Sin embargo, esta opción puede aumentar la deuda total.
Insolvencia o Quiebra (Ley 20.720): Liquidación de bienes para pagar deudas. Es crucial asesorarse legalmente.
Defensa en Juicio Ejecutivo u Ordinario: Buscar asesoría legal para enfrentar juicios de cobranza.
Consecuencias del no pago de deudas
Registro en DICOM: Exclusión del sistema financiero y dificultades para arrendar, obtener créditos o postular a fondos.
Impacto en el historial crediticio: Dificultad para obtener financiamiento futuro.
Pérdida de Bienes: Embargos judiciales pueden resultar en la pérdida total de los bienes.